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UMMO-Ciencias

Sitio dedicado al estudio racional del asunto UMMO

D74 Quienes somos - De donde venimos

¿QUIÉNES SOMOS: DE DÓNDE VENIMOS?

 

A las 4 horas 17 minutos 3 segundos TMG del día terrestre 28 de Marzo de 1950, una OAWOLEA UEWA OEM (astronave lenticuforme) establecía contacto con la litosfera de TIERRA por primera vez en la Historia.

 

El descenso se produjo en una zona definida del departamento de “Bajos Alpes” a unos 8.000 metros de distancia del pueblo de La Javie (Francia).

 

Seis de mis hermanos bajo la dirección de OEOE 95 hijo de OEOE 91 entre los que se encontraban dos YIEE (mujeres) quedaron en este “OYAA” (planeta) como primer “INAYUYISAA” expedicionario de UMMO.

 

El proceso de adaptación que comprendió la asimilación del lenguaje, captación de información en torno a costumbres, conducta social y laboral, cultura... es muy difícil de sintetizar en pocos párrafos.

 

Procedemos de un astro solidificado cuyas características geológicas externas difieren un tanto de las de TIERRA. El fonema tópico con que designamos a nuestro “OYAA” puede transcribirse con la ortografía en idioma español: UMMO (U: cerrada).

 

Su morfología puede asimilarse a un elipsoide de revolución cuyos radios son:

 

Máximo, R = 7251,608 · 103 m

 

Mínimo, r = 7016,091 · 103 m

 

La masa global es: m = 9,36 · 1024 Kg. masa

 

Inclinación respecto a la normal al plano eclíptica: 18º 39’ 56,13” (sufre una variación periódica de 19,8 segundos sexagesimales de arco). (Utilizamos unidades familiares a técnicos de TIERRA).

 

Aceleración de la gravedad (medida en AINNAOXOO): g = 11,9 metros / seg2.

 

Rotación sobre su eje: 30,92 horas (nosotros medimos en UIW. 30,92 h = 600 UIW) (equivale a 1 XII) (Vea Nota 3)

 

NOTA 3. -

La rotación de UMMO ha sido frenada por las mareas a un ritmo más acusado que la de TIERRA, pero alcanzó velocidades angulares superiores a las registradas en la historia de su OYAA.

 

(El fonema XII es una voz homófona que expresa tanto la duración del “día de UMMO” como “ciclo”, “revolución”, “rotación unitaria” etc.)

 

La estructura geológica de UMMO presenta unas caracte­rísticas diferenciales respecto a TIERRA muy acusadas.

 

Pueden discriminarse nueve XOODIUMMOO DUU OII (puede traducirse por “estratos conexionados”) que presentan rasgos geofísicos muy tipificados. La discontinuidad entre esos estratos no es brusca, existen capas de transición cuyo espesor es variable.                  

 

 

La imagen 1 muestra una sección de nuestro OYAA (planeta) reflejando los espesores de las distintas XOODIUMMO. La compo­sición química de estos estratos es muy variada. Así XOODIUMMO UO con una densidad media de 16,22 gramos/ cm2 (unidad de TIERRA) posee los siguientes elementos familiares a ustedes:

 

Cobalto           88,3%

Níquel              6,8 %

Hierro              2,6%

Vanadio           1,2%

Manganeso     0,7%

 

Una envoltura superior, la XOODIUMMO IAAS presenta en cambio una composición notablemente diferente:

 

Hierro              52%

Cobalto           33,5%

Níquel              12%

Manganeso     2,1%

Silicatos

metálicos        0,3%

 

Las capas precedentes sólidas, sometidas a gran presión están rodeadas por XOODIUMMO IEN y XOODI UMMO IEBOO en fase semifluida con gran abundancia de óxidos de titanio, silicatos de hierro y compuestos diversos de aluminio y magnesio.

 

Una de las fases esferoidales más importante es la 6ª (capa de UMMO nº 5 ) presenta un espesor aproximado de 28,8 KOAE (251 Km.). Con grandes lechos diamantíferos, presenta una estructura alveolar en la que aun restan enormes IOIXOINOIYAA (concavidades geológi­cas) en las que preservadas de las altas presiones que sufren zonas contiguas, existen enormes cantidades de sustancias orgánicas sólidas, liquidas y gaseosas, especialmente metano, propano y oxigeno. La principal actividad que ustedes denominarían vulcanológica, se manifiesta en los OAKEDEEI que arrojan hacia las capas atmosféricas grandes co­lumnas ígneas de estos gases.

 

Las últimas envolturas XOODIUMMO OANA OANMAA su­frieron en tiempos remotos procesos orogénicos de carácter metamórfico muy intenso. La erosión, sin embargo, ha modificado la estructura de los plegamientos y fallas más acusadas por lo que la orografía continental es poco accidentada.

 

Un sólo “continente” y la escasa superficie insular ocupan sólo el 38% del área global de UMMO.

 

La composición atmosférica es parecida en las cotas a nivel de XOODIUMMO OANMAA a la de TIERRA.

 

UMMO se desplaza en trayectoria elíptica (casi circular) con excentricidad 0,0078 alrededor de un OOYIA (estrella de pequeña masa) denominado por nosotros IUMMA (nuestro “sol”). La distancia media UMMO-IUMMA es de 9,96 . 1012 centímetros.

 

Nuestra forma de valorar los grandes periodos es singu­lar respecto a la de ustedes y se ha conservado a lo largo de nuestra historia pese a tener origen en un antiquísimo error astronómico.

 

Nosotros definimos el XEE (“año” de UMMO) como la fracción 1/18 de la traslación de nuestro OYAA alrededor de IUMMA. (Ac­tualmente el fonema XEE es también sinónimo de “trayectoria cíclica”).

 

Nuestros antiguos “cosmólogos,” ignorando que el plano de la eclíptica de UMMO posee distinta orientación que el del 2º OYAA que gira alrededor de IUMMA y al que tomaban como referencia, inter­pretaron que la trayectoria de UMMO era duplohelicoidal (imagen 2 y 3) sobre la superficie de un cilindro imaginario.

 

                                                                     

                       

                                IMAGEN 2 y 3 - FALSA CONCEPCIÓN

 

Creyeron así que nuestro OYAA describía tres traslaciones descendentes (2) y otras tres ascendentes (3) hasta completar el ciclo. Un XEE (año UMMO equivale a 0,212 años de TIERRA).

 

Realmente podemos hoy definir al XEE como 1/3 del periodo de traslación genuina. Seis periodos equivalen pues al ancestral XEE­UMMO = 18 XEE.

 

IUMMA es una estrella de masa 1,48 . 1033 gramos terres­tres. La distancia que la separa al SOL era el 8 de Julio de 1967: 14,421 años-luz.

 

No resulta nada sencillo identificar en las tablas astronómicas terrestres nuestra OOYIAA. Ello es debido a que nuestros especialistas han establecido convencionalmente un sistema referencia) galáctico de na­turaleza distinta al de ustedes (Vea Nota 1). El cambio de ejes referenciales no resultaría empero dificultoso si ustedes no cometieran errores. Sin embargo, hemos constatado alteraciones sensibles en datos respecto a ma­sa, magnitud, situación y distancia, de astros mutuamente identificados por ustedes y nosotros.

 

NOTA 1. -

Nosotros usamos un marco referencial con coordenadas po­lares que tienen como base nuestra propia Galaxia. Utilizamos como centros de coordinación cuatro radiofuentes situadas a 12382, 1900264, 899, 07 y 31, 44 unidades terrestres pársec y cuya estabilidad respecto al centro galáctico es muy elevada.

 

Todavía no podemos por tanto indicarles con elevado grado de certeza qué estrella registrada por ustedes pueda ser nuestra IUMMA.

 

Calculamos que las coordenadas familiares a ustedes que pue­den fijar la situación de IUMMA serían:

 

Angulo sólido definido por:

 

Ascensión recta 12 horas, 31 minutos, 14 segundos +/- 2 minu­tos 11 segundos.

 

Declinación 9º 18’ 7” +/- 14’ 2”

 

Precisamente muy cerca del centro de ese estereoángulo pro­bable (12 h 31 m;  9º 18´ ) algunas tablas elaboradas por ustedes señalan una estrella denominada por ustedes WOLF 424.

 

Esta puede ser probablemente IUMMA. Sus características son d = 14, 6 años-luz. Magnitud visual absoluta 14,3. Magnitud aparente 12,5. Espectro correspondiente a la clase M.

 

Sin embargo, tales características difieren algo de las reales. Podría explicarse el error acusado en la evaluación de la magnitud debido a la existencia de un cúmulo de polvo cósmico (espectro gravimétrico complejo con partículas sólidas metálicas ionizadas inferiores a 0,6 mm.)  muy denso. El brillo registrado por ustedes ha de ser necesariamente mucho más atenuado. El valor señalado tan bajo (magnitud registrada a 10 pársec = 14,3) corrobora nuestra sospecha.

 

Un observador situado a 10 pársec y sin obturación de polvo cósmico, llegaría a registrar, según la escala convencional de ustedes, una magnitud de 7,4.

 

Por otra parte, la temperatura media superficial de IUMMA es de 4580,3 grados Kelvin, algo superior a la valorada por ustedes. Este error es menos explicable para nosotros puesto que el espectro que ustedes puedan haber estudiado no se modifica aún mediante la oclusión de cúmulos de polvo.

 

Todas estas dificultades son difíciles de superar. Realizados los cálculos por nosotros respecto a la atenuación que puede sufrir la luminosidad debido a la elevada densidad de la nebulosa de polvo y gas, los resultados contribuyen poco a aclarar el problema, pues si el eje vi­sual atraviesa las zonas de alto porcentaje de partículas, la magnitud aparente para ustedes sería del orden de 26, difícilmente alcanzable con sus instrumentos ópticos actuales.

 

En cambio las zonas menos densas, permitirían visualizacio­nes de orden 12 a 13 de magnitud (escala convencional de terrestres) gama que corresponde precisamente a la tabulada por ustedes para WOLF 424.

 

No puede descartarse tampoco que WOLF 424 sea una de las dos OOYIA (pequeños astros) codificados por nosotros como

 

       Situado a 2,07 años-luz de IUMMA.

                            Temperatura superficial 3210º Kelvin.

 

     Situado a 0, 62 años-luz de IUMMA.

                            Temperatura superficial 2575º Kelvin.

 

IUMMA provoca alteraciones de su campo magnético muy difí­ciles de predecir a largo plazo. La intensidad detectable de ese campo en nuestro UMMO alcanza valores que para ustedes resultarían asombrosos. Los niveles extremos oscilan entre 3,8 gauss y 216 gauss.

 

Si consideran ustedes que el campo propio de UMMO es más débil que el de TIERRA, con máximos de 0,23            y mínimos de 0,07 gauss, es probable que puedan incluso ustedes al observar el espectro de nues­tro IUMMA notar el desdoblamiento de algunas rayas debido a la polarización provocada por esas perturbaciones.

 

Tan fuertes alteraciones han influido en nuestra OYAA de forma muy sensible. Por ejemplo, la estructuración de nuestra atmósfera con capas fuertemente ionizadas han preservado el medio ecológico de fuertes niveles de radiación. Las mutaciones han sido menos frecuentes en los organismos y por tanto la variedad fauna-flora, menos rica que la de TIERRA.

 

El aspecto de nuestro cielo por las noches es en cambio mucho más fantástico, gracias a meteoros que recordarían a ustedes las auroras boreales.

 

La tecnología ha tenido que marcar rumbos distintos a los terrestres. No son posibles más que en casos determinados las comunica­ciones utilizando frecuencias electromagnéticas, y la gran variedad de equipos en los que intervienen funciones gradiente de potencial magnético han de ser compensados para evitar las fuertes perturbaciones del exterior.

 

Nuestra protohistoria de la técnica registra la utilización por antepasados hermanos de grandes toroides metálicos extendidos en los campos (aún se encuentran restos de cables enterrados en aquellas épocas) en los que se inducían corrientes eléctricas intensas de carácter aperiódico cuya energía era acumulada (de modo parecido al utilizado por ustedes en sus baterías) para su utilización ulterior. (Nota 2).

 

NOTA 2. -

Nuestros antepasados hicieron enormes esfuerzos y obras grandiosas que alteraron la geografía de nuestros continentes para ob­tener y almacenar energía. Cuatro fueron las fuentes importantes explotadas. La energía térmica procedente de las zonas con gran densidad de OAK EOEEI (especie de volcanes).

 

La obtención de gas natural (rico en propano y otros hidrocarburos).

 

La utilización de energía radiante de IUMMA para lo cual se construyeron millares de canalizaciones provistas de espejos reflectores, que cubrían grandes áreas, y por último, aprovechamiento de intensidad de campo magnético de IUMMA combinada con la rotación de UMMO, obtenida mediante largos conductores (aleación de plata y cobre) enterrados a baja profundidad, formando espiras de enorme diámetro o redes de toroides (bobinas toroidales) distribuidos en la superficie de zonas desérticas.

 

La orografía poco accidentada y por tanto, la pobreza en el caudal de los ríos jamás estimuló la utilización de energía hidráulica y los hidrocarburos líquidos se encontraban a profundidades tan enormes que nuestros hermanos de aquellas edades jamás pudieron alumbrar (y cuando la técnica lo permitió ya no resultaba práctica su explotación).

 

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